Si nos pusiésemos a desarrollar la lista de las grandes estrellas que han acompañado a Tom Hanks a lo largo de su carrera, la lista sería infinita. De Paul Newman a Julia Roberts, pasando por Ellen Hunt o Denzel Washington, el sensacional actor se ha codeado con lo mejor de la industria, pero curiosamente su reencuentro más esperado era con un balón de voleibol. Efectivamente, Tom Hanks nos dejaba algunos de sus momentos más memorables en la gran pantalla en compañía de una pelota con cara dibujada que se hacía llamar Wilson. Durante los cuatro ficticios años que pasaba en la isla desierta de “Náufrago” (Robert Zemeckis), Wilson se convertía en la única compañía del personaje hasta el punto de ganarse el cariño eterno del gran público.
El gran momento se producía mientras el actor disfrutaba de un partido de los New York Rangers en el Madison Square Garden. Al ser enfocado por una de las cámaras, alguien le lanzaba la famosa pelota a un Tom Hanks que, sorprendido, comenzaba a gritar el nombre de su célebre “amigo”. atentos al momentazo.
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