La genética tiene estas cosas. A pesar de que este año soplará 64 velas en su tarta de cumpleaños, lo cierto es que es que ninguna actriz logró subir la temperatura en la gran pantalla como la Kim Basinger de los 80 y los 90. Inolvidable por sus papeles en Batman o Nueve semanas y media, la “femme fatale” se coronaría con un Oscar en 1998 gracias a su papel en la sensacional L.A. Confidencial. Lo que no sabíamos es que le ha salido una digna sucesora dentro de su propia casa.
Su nombre es Ireland Baldwin, tiene 21 años, mide 188 cm y su belleza quita el sentido. Con estas fotografías subidas a instagram, la hija de Kim Basinger y Alec Baldwin ha pasado directamente a heredar el trono de su madre como auténtico sex symbol. De hecho, en la película Grudge Match (2013) ya hizo su primera aparición en el mundo del cine interpretando a la versión joven del personaje al que daba vida su madre.
Ya habíamos visto a Ireland luciendo atractivo, pero el tiempo no hace más que perfeccionar a una joven que, en su cuenta de Instagram, acaba de colgar unas fotografías que dejan claro que la belleza se dispara en la nueva generación de los Baldwin.
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