Así iba a ser el tercer “Batman” de Joel Schumacher

Es uno de esos proyectos que nunca llegaron a ver la luz… afortunadamente. Es probable que al pensar en el principal enemigo de Batman, a todos nos venga a la cabeza el rostro del Joker. Nada más lejos de la realidad. El hombre que estuvo a punto de sepultar al Caballero Oscuro no fue otro que Joel Schumacher. El fallecido director era el encargado de tomar el relevo de Tim Burton al frente de la franquicia firmaba dos de las peores películas de superhéroes que se recuerdan. Batman Forever (1995) y Batman & Robin (1997) se convertían en dos fracasos mastodónticos y dejaban al borde de la muerte al Batman cinematográfico. Duele hasta recordarlo…

Pero Joel Schumacher todavía tenía un as en la manga. De echo, sospechamos que más que un as, era la puntilla definitiva a la franquicia. El director ya tenía entre manos el guión de Batman Unchained, un libreto que debía culminar su “trilogía de la infamia”. La cinta presentaba a un Hombre Murciélago empeñado en confrontar sus demonios del pasado. El filme también pretendía recuperar al Joker de Jack Nicholson y planeaba introducir a una Harley Quinn que sería interpretada por Courtney Love.

Afortunadamente, el descalabro de Batman & Robin sería de tal calibre que las puertas de los estudios se cerraban en la cara de un director cuya carrera quedaría marcada para siempre. el Caballero Oscuro sobreviviría gracias a un británico que respondía al nombre de Christopher Nolan y que filmaría las mejores películas de superhéroes de la historia del cine. La cabeza de Bruce Wayne nunca estuvo más en peligro que con aquella Batman 3.