La ruina económica que supuso “Matrix: Resurrections” y el fin de la saga

Matrix: Resurrections

Pocas películas tan esperadas y tan ruinosas al mismo tiempo. Después de muchos años penando por reencontrarse con Neo y compañía, a finales del año 2021 se plantaba en las salas de cine de todo el planeta Matrix: Resurrections. La exitosa saga nos ofrecía una entrega más de la mano de Lana Wachowski, lo que disparaba las ilusiones de millones de fans alrededor de todo el planeta. Además, se abría la puerta a nuevas películas de Matrix. Nadie vio venir el desastre.

La vida comercial de Matrix: Resurrections terminaba en una cifra de 157,2 millones de dólares recaudados alrededor de todo el planeta. Una descomunal decepción a nivel creativo, pero sobre todo a nivel económico. Y es que estamos hablando de una cinta en la que se invertían más de 250 millones de dólares al sumar producción, distribución y publicidad.

La película de la saga Matrix que menos había recaudado hasta el momento había sido Matrix: Revolutions con 427 millones. De ninguna forma era esperable semejante patinazo con Matrix: Resurrections, sobre todo teniendo en cuenta que se recuperaba a Keanu Reeves y Carrie-Anne Moss para la causa.

Teniendo en cuenta el hecho de que las salas de cine se quedan alrededor del 40% del precio de las entradas, estaríamos hablando de un retorno para Warner de 94 millones. Eso, comparado con los 250 millones invertidos en total, deja un saldo negativo superior a los 150 millones. Cifra levemente amortiguada por la explotación en plataformas caseras o merchandising.

En cualquier caso, lo que está claro es que la saga Matrix ha muerto ya definitivamente y no parece que haya opciones de regreso. Lástima.