Hay cosas realmente difíciles de explicar. Los premios suelen ser bastante justos y previsibles, pero siempre hay algún patinazo que resulta completamente inaceptable. Los Globos de Oro acaban de dejar claro que este año no será una excepción. De hecho, estamos ante una de las maniobras más inaceptables que se recuerdan.
Sin lugar a dudas, El Irlandés es una de las grandes películas del año. De hecho estamos ante uno de los filmes más poderosos de los últimos tiempos y de las mejores películas de ese fenómeno llamado Martin Scorsese. Una cinta en la que el director se reunía con Robert De Niro, su actor fetiche. El viejo Bobby respondía sacándose de la manga una interpretación de un nivel que no veíamos desde hace décadas, lo que le situaba entre los favoritos para hacerse con el Oscar y el Globo de Oro en la categoría de Mejor Actor en Drama. Sin embargo, su nombre se caía de la lista de forma tan inesperada como inaceptable.
Joaquin Phoenix, Antonio Banderas, Christian Bale, Adam Driver y Jonathan Pryce se hacían con las cinco plazas. Especialmente sorprendente resultaba la entrada de este último en una lista de la que nunca debió caerse un Robert De Niro que ha vuelto a recordarnos las razones por las que es uno de los mejores intérpretes de la historia. Patinazo grave de los Globos de Oro.